Cómo reconocer que merecemos algo mejor

Autoestima, amor propio, dignidad y seguridad en uno mismo, estas son las claves para reconocer que merecemos lo mejor, que no podemos mantenernos en un lugar donde no somos completamente felices y donde no somos apreciados como lo merecemos realmente.

Cada ser humano en el mundo, sea quien sea tiene un valor, es libre y merece ser tratado con respeto, cuando alguien no se siente cómodo con alguna situación, lugar o persona y siente la necesidad de apartarse para protegerse, es ahí cuando nuestra dignidad se ve fortalecida y reconocemos que merecemos algo mejor, el gran error que cometemos los seres humanos en muchas ocasiones es adjudicarle o darle entidad al otro para sentirnos bien, útiles o amados, si bien es cierto que las personas a nuestro alrededor nos hacen sentir bien, no podemos recargar sobre nadie nuestros vacíos emocionales, nuestras inseguridades y carencias; la dignidad y el respeto debe parir de nosotros y no depender de nadie más.

¿Cómo reconozco que merezco algo mejor?

Muchas veces la costumbre, la llamada zona de confort y el miedo nos estancan en situaciones o con personas que no llenan totalmente nuestra vida, el no reconocer que como ser humano merezco mejores cosas, nos hace quedarnos en terrenos “seguros” pero que van apagando nuestro ser, nuestros sueños y nuestro amor propio, el conformarse con un amor a medias, con un trabajo estable pero poco agradable, el tener una vida estándar pero no feliz, nos hace pensar que eso es lo único que merecemos y que más no se puede alcanzar.

Reconocer que merezco algo mejor, que estoy para mejores cosas y que las puedo conseguir es una muestra de amor propio, de pensar primero en uno mismo, en nuestra tranquilidad, bienestar, es defender nuestra identidad, nuestra voz y asumir un rol empoderado en la vida y en la sociedad.

No es fácil salir de una situación que nos incomoda, eso pone a prueba nuestra vida, nuestras costumbres y sentimientos, generalmente una persona que no se arriesga es conformista y se deja llevar por los demás y por los problemas de la vida, no arriesga, no gana, solo sobrevive y quebrar esa situación no es tarea fácil pero cuando se logra es muy satisfactorio, genera cambios y forja el carácter. Lo principal es reconocer que no soy feliz y dar un primer paso para cambiar dicha situación que genera angustia y depresión.

Empezar el camino al cambio

Cuando sé, que como ser humano no me encuentro feliz y cómodo con algún hecho puntual de la vida, el cambio debe ser inmediato y darle un giro a la vida, sabemos que no es un proceso fácil y que no se forja de la noche a la mañana, pero el primer paso siempre será aceptar la realidad y con ella los sentimientos de desazón, después empezar a buscar soluciones desde el propio ser para empezar a construir un cambio, amarse uno mismo, cuidarse y respetarse  siempre será la primera, la única y la mejor opción que se puede tener en momentos de crisis emocional.

Si no me gusta lo que vivo y lo que siento, cambio y busco mi felicidad, mi paz y mantengo intacta mi dignidad, solo así es posible reconocer que merecemos algo mejor, que estamos para grandes cosas y que nadie puede hacernos sentir poca cosa, valorarse sin la necesidad del reconocimiento público es la base sólida y fundamental para llevar una vida de auténtica y felicidad pura.