Todas las personas en el mundo enfrentamos y escondemos miedos en lo más profundo de nuestro ser, los miedos y las inseguridades nos llevan a quedarnos en una zona de confort en la que no encontramos salida y tampoco encontramos satisfacciones ni cosas nuevas que aporten valor a nuestra vida. El miedo nos impide crecer, avanzar y cumplir metas, pues a veces el arriesgarnos por algo que en el fondo deseamos implica cambiar de vida y enfrentarnos a lo desconocido, a lo que no es seguro y a la aventura.
Muchas personas, la mayoría, le tienen miedo al fracaso, a no poder realizar sus sueños o a tomar decisiones erróneas que los lleven a perder todo lo que con tanto esfuerzo y dedicación habían conseguido, pero el hecho de sentir miedo no los impulsa a descubrir que arriesgarse es la mejor manera de crecer, de sentirse vivos y aprovechar talentos y habilidades que no sabían que tenían. El miedo debe ser un impulso y se debe transformar en una fuerza interna que nos ayude a cumplir nuestros sueños y a enfrentar con mucho valor las pruebas y los obstáculos de la vida.
Vencer el miedo
No es fácil vencerlo, transitarlo, superarlo y menos cuando el miedo está en nuestra mente aferrado a nuestro ser, el primer paso es entender porque se siente ese miedo, de donde proviene y que tanto puede llegar a afectar nuestras vidas. En muchas ocasiones los miedos no vienen de adentro de nosotros; los miedos a veces son infundidos y creados por terceros, como seres humanos adoptamos los miedos que vemos a nuestro alrededor o que nos inculcan nuestros padres, lo cierto es que no existe una sola manera de tener miedo o de crearlo en nosotros, nuestro entorno está muy involucrado, pero es deber nuestro identificarlo y entender que los miedos e inseguridades en los demás no deben jamás influir en nuestra vida.
Los miedos nos paralizan, se propagan y se aferran a nuestra mente impidiendo que nosotros podremos hacer las cosas que queremos, impidiendo que tengamos determinación y valor para vivir la vida que tanto imaginamos, es necesario confrontar los miedos, hacerles frente y convencernos a nosotros mismos que todo se puede lograr con esfuerzo, lucha y dedicación, que en la vida no se puede ser inseguro, se debe andar con paso firme y demostrándonos a nosotros mismos que aunque tengamos miedo, son más grandes nuestras ansias de superación personal. La respuesta y la clave para superar el miedo es actuar, no huir, no dejarnos llevar por ese sentimiento de ansiedad y finalmente cuando vemos nuestros miedos cara a cara podemos abrazarlos y sentir que por medio de ellos vamos a poder emprender con fuerza y valentía cualquier obstáculo de la vida, pero sobre todo que ese impulso nos ayudara a cumplir nuestras metas y a fijar un horizonte sólido en el que nosotros tenemos el control de nuestra vida y de nuestras emocione. El control es tuyo no del miedo.